Como cocinar chinchulines en la parrilla

Los chorizos, chinchulines o morcilla forman el grupo de las achuras que normalmente se pueden ver en todos los asados argentinos. Vamos a ver como preparar los chinchulines y como cocinar en la parrilla.
Cuidado, si no tienes parrilla, la preparación es muy similar para cocinar en un horno.

Ingredientes

• Chinchulines frescos (1 kilo)
• 1 diente de ajo
• 1 Limón
• Sal y pimienta

Preparar los chinchulines

Lo primero es limpiar los chinchulines. Después podemos limpiar el interior. Aunque hay gente que diga que no se tiene que hacer por que se pierde gran parte del sabor. Esto, ya queda a decisión de cada uno.
Si se quiere limpiar por dentro hay que agarrar desde un extremo y con la ayuda de mucha agua tratamos de ir doblando y limpiando.
Por último colocamos en una fuente jugo de limón, ajo picado, sal y pimienta. Creo que la cantidad es a gusto de cada uno.
Dejamos los chinchulines un tiempo prudente mientras preparamos la parrilla.

Hablando de la parrilla tenemos que saber que la cocción de los chinchulines consumen bastante carbón y necesitamos una parrilla bien caliente.

Cocinar chinchulines a la parrilla enteros

Se tienen que realizar dos nudos, uno en cada extremo antes de ponerlos en la parrilla.
Con esto buscamos que el relleno de el mayor sabor.

Cocinar chinchulines a la parrilla trenzados

En este caso es requisito quitar la mayor cantidad de grasa posible.
Doblamos una punta como haciendo un circulo y pasamos el chinchulin por el medio. Luego hacemos lo mismo hasta llegar al final donde hacemos un nudo.
Entiendo que es un poco difícil de explicar, pero en un video se entiende mucho mejor.
Cuidado, cocinar bien por que se dice que en el pliegue de la trenza puede quedar crudo.

Cocinar chinchulines a la parrilla tiernizados

Colocamos en una fuente para horno una mezcla de ají molido, comino, oregano, ajo, leche y un poco de limón.
Colocamos nuestros chinchulines en esa fuente y los llevamos a horno por al menos una hora.
Luego lo llevamos a la parrilla hasta que tenga un color dorado.

En todos los casos, comemos caliente (mucho cuidado con el relleno) y con un poco de limón.